Comienza por dejar claro en tu currículum que estás buscando oportunidades remotas (si es el caso). Puedes incluir habilidades que se aplican a prácticamente todos los trabajos de empleo, como marketing, informática y trabajo en equipo.

Recomendamos Subir tu currículum en LinkedIn, ya que te conecta con profesionales de todo el mundo.

Si bien la información de contacto como la ciudad y la dirección son importantes en los currículums tradicionales, es posible que no sea necesario agregar una dirección física al solicitar un trabajo remoto porque trabajarás desde casa.

Se deben cubrir las habilidades duras y blandas, mientras que, como miembro del equipo, debes sentirte cómodo usando el software de gestión de proyectos, los mensajes de texto y las reuniones de Zoom. Incluso puedes agregar algún software con el que esté familiarizado, como Asana, Zoom, Google Hangouts y Slack.

La mayoría de las empresas quieren contratar a alguien que construya relaciones positivas con sus colegas de forma remota, así que intenta agregar algunas habilidades interpersonales como inteligencia emocional, comunicación, confiabilidad, liderazgo, negociación, apertura a la retroalimentación y empatía.

Escribe un apartado especial llamado perfil profesional u objetivo laboral. En el mismo relaciona la competencia con el trabajo realizado de forma previa. Esta posibilidad también se podría incluir en la sección de experiencia laboral, aunque no deja de ser una enumeración de destrezas.

Recuerda que los reclutadores valoran positivamente a los candidatos que por sí solos tienen iniciativa, independencia y autonomía. Son trabajadores inquietos, curiosos, y por ello mismo son una garantía de compromiso y productividad.